Epilepsia

¿Qué es la Epilepsia?

La epilepsia, también conocida como trastorno convulsivo, es una afección cerebral que causa convulsiones recurrentes. Hay muchos tipos de epilepsia. En algunas personas, se puede identificar la causa. En otras, se desconoce la causa.

La epilepsia es frecuente. Se estima que el 1,2 % de la población de los Estados Unidos tiene epilepsia activa, de acuerdo con los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades. La epilepsia afecta a personas de todos los sexos, razas, grupos étnicos y edades.

El tratamiento con medicamentos, o en ocasiones la cirugía, puede controlar las convulsiones en la mayoría de las personas que tienen epilepsia. Algunas personas necesitan tratamiento de por vida, pero, en otros casos, las convulsiones desaparecen solas. Algunos niños con epilepsia también pueden superar su afección con la edad.

Síntomas

Los síntomas de las convulsiones varían según el tipo de convulsión. Dado que la epilepsia se debe a cierta actividad en el cerebro, las convulsiones pueden afectar cualquier proceso cerebral. Algunos de los síntomas de las convulsiones pueden incluir los siguientes:

Confusión temporal.
Episodios de ausencias.
Rigidez muscular.
Movimientos espasmódicos incontrolables de brazos y piernas.
Pérdida del conocimiento.
Síntomas psicológicos, como miedo, ansiedad o déjà vu.

Señales de alarma de las convulsiones

Algunas personas con convulsiones focales experimentan señales de alarma momentos antes de tener una convulsión. Estas señales se conocen como aura.

Las señales de alarma pueden ser una sensación en el estómago o emociones, como el miedo. Algunas personas tienen experiencias de déjà vu. Las auras también pueden ser un sabor o un olor. Pueden ser visuales, como una luz fija o intermitente, un color o una figura. Algunas personas pueden tener mareos o perder el equilibrio. Otras pueden ver cosas que no son reales, lo que se conoce como alucinaciones.

Las convulsiones que aparentemente se producen a causa de la actividad en una sola parte del cerebro se denominan convulsiones focales. Estas se agrupan en dos categorías:

Anteriormente denominadas convulsiones parciales simples, estas convulsiones no causan la pérdida del conocimiento (consciencia). Pueden alterar las emociones o cambiar la manera de ver, oler, sentir, saborear o escuchar. Algunas personas tienen déjà vu. Este tipo de convulsión también puede producir espasmos involuntarios de una parte del cuerpo, como un brazo o una pierna. Además, las convulsiones focales pueden ocasionar síntomas sensoriales como hormigueos, mareos y destellos de luz.

Anteriormente conocidas como convulsiones parciales complejas, estas convulsiones incluyen una alteración o la pérdida de la conciencia. Con este tipo de convulsión, la persona puede sentir como si estuviera soñando. Durante una convulsión focal con alteración de la conciencia, algunas personas miran fijamente al espacio y no responden con normalidad al entorno. También pueden hacer movimientos repetitivos, como frotarse las manos, masticar, tragar o caminar en círculos.

Cuándo consultar al médico
Busca ayuda médica inmediata si ocurre lo siguiente durante una convulsión:
La convulsión dura más de cinco minutos.
La respiración o el conocimiento no se recuperan una vez que finaliza la convulsión.
Se produce una segunda convulsión de inmediato.
Tienes fiebre alta.
Estás embarazada.
Tienes diabetes.
Sufriste una lesión durante la convulsión.
Sigues teniendo convulsiones a pesar de estar tomando los medicamentos anticonvulsivos.